Imagen tomada de la web
Su ojo redondo y acuoso se clava
en el mío como el anzuelo que se clavó en su escamoso cuerpo. La curva triste
de su boca dibuja un garabato con un poso de dignidad casi humana. Cuando me
hice pescador nunca pensé en los ojos de los peces ni en los mensajes de su
boca; sólo pensé en llenar mi cesta antes que mi padre y, en conseguir un ejemplar
más gordo y más grande. Y aquí estoy, debatiéndome entre la culpa y el
ridículo. La cesta abierta me urge a dejarlo caer dentro, su ojo -todavía vivo-
taladra de incertidumbre la distancia de mi mano hasta ella. De repente es tan
absurdo un pez dentro de una tumba de mimbre... El agua ondea bajo el sol
mortecino de la tarde reclamando su ejemplar de plata. Lo dejo resbalar de mis
manos al agua y regreso custodiado por las primeras sombras de la noche, voy
pensando en el hueco de la pared del salón, el que tenemos reservado para la
foto con mi primer ejemplar.
Este texto recibió un accésit en la convocatoria 3x200 que Grupo Andén puso en marcha para conmemorar la noche de los libros 2014 que celebra en Madrid el Día Internacional del Libro (23 abril), resultó ganador el texto "Nocturnidad" de Miguelángel Flores, y finalistas junto con mi texto, los de los agentinos Gabriel Bevilaqua y Patricia Nasello. Entre los finalistas estuvo el texto "Hematófago" de Javier Ximens.
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